lunes, 31 de octubre de 2011

"Solamente lágrimas", de Nazara Hernández

ACTO ÚNICO
    
(El escenario se ilumina tenuemente, con apenas attrezzo, mientras suena una trágica música. Entra en escena un chico, no supera la veintena. Camina con los hombros caídos y la mirada perdida.)


Marx: (Pregunta en voz alta, como si reflexionase, aún con la mirada perdida.) ¿Habéis llorado alguna vez? (Mira ahora al público y alza la voz.) Tú, ¿has llorado? (Mantiene la mirada, con tensión.)

(Sus elegantes ropas de fiesta han perdido su porte, se arrugan y le confieren un aspecto descuidado y triste; en la mano lleva una botella de ron a medias a la que da tragos largos entre unas frases y otras.)

Marx: Yo sí. (Avanza un paso, tropieza, cae y se queda sentado en el suelo. Vuelve la mirada ausente con miedo.) He llorado tantas veces, que podría hacer un río sólo con mis lágrimas, un río que desembocaría en las de ella, en su mar de lágrimas. Somos dos sufridores condenados a perdernos.


(Aparece ella. Él no la mira. La chica avanza con paso decidido y se acerca a él.)

Carina: ¿Preguntabas por lágrimas? ¿Hablabas de llorar? Yo también he llorado; sí, he llorado. No me mires así, pues tú ya lo sabías. Sabes que he llorado por amor. (Se acerca a él por detrás, se agacha y le abraza por la espalda. Sus miradas se cruzan. Él no consigue mantenerla y termina bajándola.) Mírame.

Marx: Yo he llorado por desamor, porque he visto cómo te ibas de mi lado. (Ella le hace callar poniendo su dedo sobre los labios de él.)


Carina: Llorar de amor supera mil veces a las lágrimas de desamor. (Mira al frente, evocando sus recuerdos.) Despertar al lado del que amas, ver sus ojos cerrados y en calma, levantarte lentamente para no despertarle, darte la vuelta y que coja tu mano, te empuje hacia él y que te bese con un «Buenos días, princesa». Mirarle a los ojos y desear quedarte en ese instante para siempre. Cuando no necesitas tenerle a tu lado a cada segundo para sentirle, cuando eres capaz de amar cada uno de sus defectos, cuando te enamoran sus manías y la forma en que se toca el labio inferior cuando está preocupado. No te hace falta nada más; en sus brazos olvidas el mundo y nuestras miradas crean un lugar nuevo al que sólo sabemos entrar él y yo. (Se ha levantado y termina de pie, frente al público.)

(Entra por un lateral un chico, despeinado y de cara pícara. Rompe el silencio que se ha creado con su risa.)


Luca: Ahora que me acuerdo, aquella vez en el parque, todos sentados y hablando tranquilos. ¿Recuerdas aquel día? (No espera la respuesta, sigue hablando entre risas, sin ser consciente de la escena que tenía lugar segundos antes.) Seguramente no, pasamos todos los días igual en aquel viejo parque destartalado, de columpios rotos y balancines chirriantes. Pero el día del que hablo fue especial… ¡y vaya que sí lo fue! La primera vez que lloré de risa, nada más y nada menos, a esa vez la seguirían más lágrimas, pero ningunas como aquéllas. De repente, te levantaste, cogiste dos palos del árbol y me ofreciste uno para batirnos en duelo, como si fuéramos caballeros. (Recrea la batalla imaginaria.) Todos animaban y cogiste valor, quizás demasiado (Sigue riendo.) Te subiste a la baranda y desde ahí me gritaste: «Ha llegado tu fin, cruel caballero…». Y seguidamente te lanzaste a por mí. Yo me aparté y rodaste por el suelo dando vueltas varios metros. Corrí detrás de ti y me tiré a tu lado. No parabas de reírte —para evitar el dolor, supongo— y yo no conseguía contenerme tampoco. Reímos como nunca. Me sentía un niño. Las risas de los demás me animaban a seguir y, entonces ocurrió: unas lágrimas rodaron por mis mejillas. No me las enjuagué, no me daba vergüenza ni tristeza alguna llorar; quería que todos vieran cómo también se puede llorar de felicidad.

(Sale, coge dos palos y ofrece uno a su amigo, que lo acepta, lo mira y lo suelta a su lado. Él se sienta en el otro extremo del escenario esperando alguna reacción, que no llega.)

Carina: Son las lágrimas de oro; ésas de las que hablas. (Se aleja del centro. Al pasar al lado de Marx, le acaricia la mejilla y continúa hasta el extremo del escenario, donde se queda de pie.)


Marx: (La sigue con la mirada triste.) Duele, cuando se va de tu lado. (Pausa.) Empiezas a extrañar sus caricias, no sabes vivir sin ella, se rompe tu rutina, ya por las tardes no la tienes a tu lado contándote anécdotas y haciéndote reír. Y es que ahora no hay risas, sólo quedan ecos. Entonces lloras, porque sabes que no te ama; no puede hacerlo. Y, sin embargo, tú la adoras. Es en ese momento cuando hace daño; entiendes el significado de «No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes», y no puedes evitar llorar sintiendo pena de tu estupidez por dejarla marchar. Llorar por darte cuenta de que tienes que olvidar; ella ya lo ha hecho, y sufres por sentir desamor, por sentir el rechazo venir hacia ti de aquella a la que has entregado tus sentimientos.

(Se encuentran en escena los tres, pero es como si estuvieran solos; no se relacionan entre sí. Carina se queda en un lado de pie. Luca se mantiene sentado en el suelo. Marx continúa en el centro del escenario, ahora de rodillas, con la cara entre las manos al terminar de hablar. Es entonces cuando aparece Javi; entra con prisa, cruza el escenario y comienza hablar.)


Javi: No puedo. Siento dentro de mí que no puedo hacerlo. No voy a darle más vueltas. Me rendiré; lo siento por la editorial y lo siento por todo, pero es que no me salen las palabras, se esfuman cuando estoy a punto de alcanzarlas. ¡No puedo! Es demasiado para mí. Todo esto me supera, me estresa, me bloquea… No me sirve en absoluto. Llorar ni siquiera me alivia, me vacía aún más. Lloro de frustración al darme cuenta de que no soy capaz de ayudarme a mí mismo.

Marx: (Con una neutralidad que contrasta con la frustración del otro.) ¿Qué ha pasado? 


Javi: Que he decidido dejarlo. Eso ha pasado. Que me han pedido que escriba otro libro y no puedo. No puedo repetir lo mismo dos veces, ya dije todo lo que quería decir. ¿Por qué me piden más? No lo entienden, ya no tengo más. Me quedaré sin trabajo, sin dinero… ¡Me da igual! Ya me he quedado sin imaginación ni sentimientos. ¡Qué más da que se lleven también lo que tengo para vivir! Sin historias no hay vida. (Se derrumba sobre el suelo, inconsciente. Los demás ni siquiera lo miran. Silencio. Entra Laura; lleva puntas de ballet y viste de bailarina contemporánea; sonríe.)

Laura: Marx, lo he conseguido. Mi grupo y yo hemos llegado a la final. ¡Lo hemos logrado!


Marx: Confiaba en que lo haríais. Me alegro mucho. (Neutro una vez más, habla automáticamente, sin sentimiento.)

Laura: No podía con los nervios antes de la actuación. Sabía que el trabajo duro y la confianza en mi grupo darían sus resultados, pero no estaba segura de que fuera suficiente… Pero después de salir al escenario, todas esas dudas se disiparon, sentimos juntas la música y nos movimos a su compás convirtiendo nuestros pasos en danza. Hubo un momento en el que las miré a todas y me sentí parte de ellas. Realmente orgullosa por pasar mi tiempo con ellas, por lograr cosas nuevas con ellas y, sobre todo, por trabajar, hombro con hombro, con ellas. Cuando me di cuenta, estaba llorando. Llorando de orgullo, de satisfacción por lo que estábamos logrando. Fue mágico.


(Comienza a sonar la música. Laura levanta la vista y comienza a bailar. Va bajando paulatinamente el volumen y, con él, disminuye el ritmo del baile de Laura, que termina de espaldas. Marx se ha levantado y aplaude. Oscuro. Desaparecen en la oscuridad todos excepto Marx, que continúa en el centro aún aplaudiendo. Tras un momento mira a su alrededor y es consciente de que no hay nadie más, que han desaparecido todos.) 


Marx: (Mira a su alrededor, buscando a aquéllos que, en realidad, nunca han estado allí. Cae en la cuenta y mira su botella acusadoramente. Ahora sabe la verdad.) No voy a seguir negando lo evidente. Es demasiado tarde para echarse atrás, estoy solo. Acompañado de recuerdos, eso sí. Pero recuerdos inútiles al fin y al cabo; no me pueden consolar con caricias si sufro, ni darme un abrazo para celebrar conmigo mi alegría. ¿De qué me sirve tener ojos si no tengo a quién mirar? ¿De qué me sirve tener brazos si no puedo tocar a nadie? Soy inútil aquí, no hago falta. Podría desaparecer ahora mismo, igual que mis espejismos, y el mundo seguiría girando igual. (Ha contenido una gran emoción, pero ahora se derrumba; baja la mirada y llora.) Ya me voy, aquí no tengo nada más que hacer. Pero, antes, sólo una cosa más. (Levanta la mirada hacia el público y habla como quien revela una verdad escondida.)
Respondo a mi pregunta del comienzo: —Sí, habéis llorado. Unos más que otros, todos por distintos motivos y en diferentes momentos. A veces de amor, otras de odio. Y no desapruebo que lo hagan, yo mismo he llorado; pero ahora recuerdo, quizás demasiado tarde, una verdad que oí hace tiempo y quiero compartir con ustedes: «Nunca llores de soledad, porque entonces nadie secará tus lágrimas». (Baja la cabeza, suena música mientras se apagan las luces lentamente. Oscuro.)


Nazara Hernández González
Primer premio en la categoría Juvenil
28 Concurso de Obras de Teatro escritas por Niños y Jóvenes 


viernes, 28 de octubre de 2011

"El árbol mágico", de Yeneva Arteaga Armas


Narradora: Había una vez una niña que tenía un caballo bueno y bonito, pero un poco viejo para trabajar. Un día el caballo dijo:

Caballo: Tengo hambre, no me has dado nada de comer en dos días.

Niña: ¿Cómo quieres comer si ya no quieres trabajar?


Caballo: Tú sabes que estoy viejo y que ya no puedo trabajar.

Niña: Lo sé mi caballo bonito, pero tienes que ayudarme; si no, no tendremos para comer.

Caballo: ¡Lo intentaré!

Niña: Vamos, ayúdame a sembrar estas tierras para que nazcan papas y poder venderlas para conseguir dinero.


Narradora: El caballo, muy contento, ayudó a la niña, pero no soportó el esfuerzo y se desmayó.

Niña: ¡Caballo, caballito! ¿Qué te pasa?


Caballo: Estoy demasiado cansado y viejo para trabajar.

Narradora: Cuando de repente... apareció un zorro.


Zorro: ¡Qué te pasa, caballito! ¿Por qué estás en el suelo?

Caballo: ¡Oh, oh! Es que estoy muy viejo para trabajar y no tenemos nada para comer.

Zorro: No te preocupes, caballito, yo tengo la solución.

Narradora: La niña se puso muy contenta al oír al zorro porque tenía una solución para su pobreza.

Zorro: ¡Vamos, caballito, vamos al bosque a buscar al árbol de las piedras preciosas; él nos ayudará!


Narradora: El caballo y el zorro se despidieron de la niña y se adentraron en el bosque.

Caballo: Qué bosque tan oscuro y tenebroso. ¡Qué miedo tengo!

Zorro: Tranquilo, caballito, no te va a pasar nada; pronto llegaremos al árbol de las piedras preciosas y todos tus problemas habrán acabado.

Narradora: Tras varios días caminando, el caballo y el zorro llegaron al árbol.


Zorro: Hola, árbol, te traigo un amigo para que lo ayudes.

Árbol: Hola, caballito, ¿qué te pasa, en qué te puedo ayudar?

Caballo: Es que estoy demasiado viejo para trabajar y yo y mi ama estamos pasando mucha hambre, ya que no puedo ayudarla a sembrar las tierras.

Árbol: No te preocupes; coge unas cuantas piedras preciosas de mis ramas y llévaselas a tu ama para que puedas venderlas y conseguir dinero para comer.


Caballo: Gracias, árbol, me has hecho muy feliz; gracias a ti no volveremos a pasar hambre.

Árbol: Sólo te pido un favor.

Caballo: Dime, árbol.

Árbol: No cuentes a nadie dónde has conseguido estas piedras, ya que, si lo cuentas, todo el mundo vendrá y me quitarán mis piedras; entonces yo moriría.

Caballo: Tranquilo, árbol, guardaré tu secreto.

Narradora: El caballo y el zorro se despidieron del árbol y regresaron a casa de la niña con las piedras preciosas. Tras varios días caminando, llegan a la casa.


Caballo: Toma, mi ama, he conseguido estas piedras preciosas para que las vendas.

Niña: ¡Qué bien, caballito! Gracias a estas piedras, jamás volveremos a pasar hambre, ya que con ellas compraré comida y otros animales que me ayuden, y tú no tendrás que volver a trabajar.


Narradora: Desde ese día el caballo, la niña y el zorro vivieron felices y jamás volvieron a pasar hambre.

Fin





Yeneva Arteaga Armas, 9 años
Colegio Anselmo Pérez de Brito
Primer premio en la categoría Infantil
28 Concurso de Obras de Teatro escritas por Niños y Jóvenes


jueves, 27 de octubre de 2011

Día grande en la Biblioteca de Teatro

Jornada intensa y emotiva  la que hemos vivido hoy con la entrega de los premios del 28 Concurso Insular de Obras de Teatro escritas por Niños y Jóvenes. La Biblioteca registró un lleno absoluto por parte de familiares, amigos, representantes políticos y amantes del teatro, que no quisieron perderse este acto. La tarde empezó con un momento muy especial, puesto que nuestra querida Pilar Rey, tras una larga convalecencia, nos visitó por primera vez para ejercer como maestra de ceremonias del acto. Así pues, por fin hemos podido tener la esperada imagen de Pilar Rey y a Antonio Abdo juntos en la Biblioteca.

Pilar Rey y Antonio Abdo en la Biblioteca de Teatro
Pilar Rey presentó los premios con el desparpajo, humor y el estilo reivindicativo que siempre la han caracterizado. Repasó la historia del premio desde su origen en 1983, sus avatares y sus anécdotas y agradeció la recuperación de estos galardones para los que pidió el mayor de los apoyos. También agradeció la implicación de los colegios y educadores y tuvo palabras especiales para la dirección del colegio Anselmo Pérez de Brito de Santa Cruz de La Palma y para el Club de Lectura de la Biblioteca de Los Llanos de Aridane.

El público abarrotó el espacio de nuestra Biblioteca, convertida en salón de actos improvisado
A continuación el concejal de Cultura del ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, Zacarías Gómez, hizo entrega del diploma acreditativo de las menciones especiales del jurado en la categoría infantil:

Victoria Morales Sicilia por la obra El secreto de la sopa

Rafael Cabezola Bello por El rescate del tesoro robado

El Club de Lectura de la Biblioteca de Los Llanos de Aridane por Una pesadilla muy real. Asistieron varios niños miembros del Club y su monitora, Eugenia Cabrera, así como la concejal de Cultura de Los Llanos de Aridane, María Nieves Barroso. Les agradecemos el esfuerzo de haberse desplazado hasta Santa Cruz de La Palma para compartir este acto con nosotros.
El alcalde de Santa Cruz de La Palma, Sergio Matos Castro, entregó el premio de teatro infantil a Yeneva Arteaga Armas por su obra El árbol mágico.
 
El premio está dotado con diploma, un lote de libros y un pase para dos personas para los espectáculos de teatro infantil que se programen en Santa Cruz de La Palma durante esta temporada
Y el actor y director Antonio Abdo entregó el premio de la categoría juvenil a Nazara Hernández, autora del texto Solamente lágrimas.

La ganadora ha recibido el trofeo del Arlequín, un lote de textos teatrales y un pase para dos personas para las funciones de teatro que se programen en Santa Cruz de La Palma durante la presente temporada
A continuación llegó otro de los momentos esperados de la tarde, con la hermosa puesta en escena que el grupo infantil de la Escuela Municipal de Teatro Pilar Rey hizo del texto El árbol mágico, obra ganadora en la categoría infantil. Un texto que publicaremos en este blog próximamente y que ha sido dirigido por David Brito.

Grandes y pequeños siguieron atentamente la representación
Nuestra pequeña autora fue invitada a saludar después de la función
Y para finalizar, el grupo de jóvenes de la Escuela escenificó Solamente lágrimas, el potente texto ganador de la categoría juvenil, que también publicaremos aquí. Su autora, Nazara Hernández, es alumna de la Escuela y participó de la representación encarnando uno de los papeles. La dirección corrió a cargo de Carlos de León.

Un momento de la puesta en escena de Solamente lágrimas

El público valoró con un gran aplauso el texto de esta joven autora.
De ese modo concluimos una jornada tan especial, en la que hemos disfrutado al comprobar que los más pequeños y nuestros jóvenes tienen mucho que contarnos y que aportar al género teatral. Reiteramos nuestro agradecimiento a cuantos han participado y nos han ayudado en la organización de esta edición. Trabajamos ya en la convocatoria de los 29 premios de teatro. Muy pronto publicaremos las bases.
 
Los alumnos y profesores de los grupos infantil y juvenil de la Escuela de Teatro, junto a Antonio Abdo
Un momento para la conversación tranquila después de la entrega de premios. Pilar Rey charla con uno de los impulsores de la Biblioteca, Víctor Hernández Correa

lunes, 24 de octubre de 2011

"La noche del miedito"


Éste es el vídeo promocional con el que nuestros amigos de la Escuela Municipal de Teatro Pilar Rey presentan, con motivo (o mejor, con la excusa) de la fiesta de Halloween, su particular "noche del miedito": un maratón de Cortometrajes escritos y protagonizados por los propios alumnos de la Escuela, tanto del grupo de jóvenes como del grupo de adultos. La cita es el próximo lunes 31, a las 7.30 de la tarde en la Plaza de España. La cosa promete. No lo dudes y ven a pasar... "miedito".

jueves, 20 de octubre de 2011

Un breve apunte sobre el trofeo del Arlequín

El trofeo que sirve de distintivo al Concurso Insular de Obras de Teatro Escritas por Niños y Jóvenes fue diseñado en 1983 por el propio Antonio Abdo, en los primeros tiempos de la convocatoria del premio, que entonces gestionaba la Escuela Municipal de Teatro. A partir del dibujo original, la obra fue dimensionada por el maestro artesano Ramón Barreto, cofundador y codirector, junto a Vina Cabrera, del conocido taller de cerámica «El Molino», establecido en Villa de Mazo.


En su elaboración, el trofeo sigue las técnicas escultóricas de la cerámica tradicional en la isla de La Palma, de raíz aborigen, denominada cerámica negra, cuya fábrica se inicia con el proceso de selección de la arcilla y continúa con las mezclas de arena, el modelado artesanal (sin intervención del torno) y su cocción en horno.

El diseño de Antonio Abdo toma como motivo de inspiración la prenda arquetípica de uno de los personajes más singulares de la Commedia de’llarte italiana, el bicornio o sombrero de dos picos que sirve en ocasiones de gorro a Arlequín, caracterizado por llevar las puntas laterales recogidas hacia arriba. Abdo incluye también la máscara que portaba el mismo personaje, concebida como dos rostros vacíos que simbolizan la comedia y la tragedia.

El color del trofeo reinterpreta, además, el sentido simbólico que tenía la gama de marrones oscuros de la careta arlequinesca, como señal de la condición de criado del Arlecchino original de la Commedia. El dibujo del trofeo aparece en 1992 en la cubierta del libro que reúne las obras premiadas en la décima edición del concurso y es el que acompaña a estas líneas.

lunes, 17 de octubre de 2011

El 27 de octubre, cita en la Biblioteca

El jueves 27 de octubre tenemos una importante cita en la Biblioteca. La entrega del 28 Premio de Obras de Teatro escritas por niños y jóvenes promete ser un acto divertido, entrañable y de mucho interés. Comenzaremos a las 7 de la tarde con la lectura del acta del jurado y la entrega del premio infantil a la niña Yeneva Arteaga, que obtuvo su galardón por la obra El árbol mágico. También se hará entrega de un diploma a los tres accésit concedidos por el jurado a los niños María Victoria Morales Sicilia, Rafael Cabezola Bello y a los componentes del Club de Lectura de la Biblioteca Pública de Los Llanos de Aridane. A continuación, el grupo de niños de la Escuela Municipal de Teatro Pilar Rey escenificará la obra ganadora con dirección de David Brito. Posteriormente tendrá lugar la entrega del premio en la categoría juvenil, concedido a Nazara Hernández González por su magnífico texto Solamente lágrimas, que será interpretado a su vez por el grupo juvenil de la Escuela, bajo la dirección de Carlos de León. No te lo pierdas. Una estupenda oportunidad de disfrutar del teatro fresco y sincero de nuestras más recientes generaciones.

jueves, 13 de octubre de 2011

También los pequeños tienen sus novedades

Los libros de teatro publicados expresamente para niños (y no para adultos que hacen teatro para niños) son una de las grandes asignaturas pendientes de las editoriales. Por fortuna de vez en cuando surgen apuestas que tratan de acercar con buen criterio el libro teatral a los más pequeños y jóvenes. Este año, gracias a la aportación anual que el Cabildo de La Palma hace a las bibliotecas municipales, hemos podido incorporar varios títulos a nuestra sección infantil, que esperamos ir incrementando poco a poco. Las novedades corresponden a los títulos de la colección "Sopa de Libros" de la editorial Anaya, en colaboración con la Fundación Autor, con una presentación muy cuidada, bellamente ilustrados y orientados a diferentes grupos de edad. Estos son los títulos que desde hoy incorporamos a nuestro catálogo:

Barriga. Un monólogo de Juanluis Mira con ilustraciones de Noemí Villamuza en el que una mujer embarazada va contando a los niños sus experiencias, sensaciones y emociones. Les habla de cómo llevamos la vida escrita en la piel, de islas que quieren ser archipiélagos, de sueños y malabarismos... A partir de 6 años.

Blanco (El libro que nació sin tinta). De Ángel Solo, con ilustraciones de María Espluga. Es de noche y la biblioteca está cerrada. Todo parece tranquilo, pero… Sabueso recorre los pasillos buscando a su amiga Mágica que ha desaparecido sin dejar rastro, y en medio de su investigación se encuentra con un libro muy especial. Un libro distinto. No tiene ni una sola palabra, ni una letra, ni tan siquiera los números de las páginas. Nada. Solo es un libro en blanco. A partir de 8 años. 

Dora, hija del sol. Obra de Carmen Villaba ilustrada por Tae Mori. Dora, una niña mulata, y su abuelo viven realquilados en la casa de la Viuda sin Corazón, que los humilla y los espía con su loro Rigoletto. Un compañero de la clase de Dora, Charli, y su Mala Sombra hacen la vida imposible a Dora. Para explicar a la niña por qué el color de su piel es diferente, su abuelo le cuenta que todos venimos de Pinganillo, el volcán de las burbujas. Dora conseguirá vencer las sombras que la atormentan y recuperar la amistad de Charli. Para ello, va a ser fundamental la ayuda de Liang, la cocinera de un restaurante chino. A partir de 10 años.

Descubriendo, que es gerundio. De Alberto Iglesias con ilustraciones de Javier Olivares. Cele quiere descubrir tierras aún desconocidas. Tiene un pálpito en el corazón que le dice que tiene que ser descubridor. Terio, su amigo, se despierta y ve que Cele no está en su cuarto. Sale de casa en su busca y lo encuentra en el puerto. Cuando Cele le cuenta sus planes, Terio decide que lo mejor es acompañar a su amigo. A partir de 10 años.

El árbol de Julia. De Luis Matilla. Ilustraciones de Irene Fra. Julia es una chica alegre, imaginativa y decidida, hasta tal punto que recurre a una original estrategia para dar la lección que se merecen aquellos adultos que solo viven para obtener éxito y dinero. Basada en un hecho real, El árbol de Julia plantea, con enorme fuerza expresiva, una reflexión sobre los verdaderos valores humanos. A partir de 10 años.

Lejos. De Magda Labarga con ilustraciones de Ignaci Blanch. Mina tiene diez años y vive con sus padres. Su vida cambia cuando se entera de que irán a vivir lejos, al otro lado del mar. El primero en marcharse será su padre, que buscará trabajo y una casa para todos en ese nuevo país. Mina no entiende por qué no pueden irse todos juntos, ni por qué no se puede prosperar más cerca. Su mejor amigo, Leandro, y su abuelo son los únicos con los que habla de las cosas que no entiende, de todas las preguntas que lleva dentro. A partir de 8 años. 

Se suspende la función. Obra de Fernando Lalana ilustrada por Enrique Flores. «Estimados amigos, jóvenes espectadores, amado público... ¡Ejem...! Esto... ¿Podría alguien explicarme qué demonios estáis haciendo aquí? Porque... ¿no habréis venido, por casualidad, a ver una función de teatro?». Desde 8 años.  


¿Es tuyo? De Pep Albanell. Ilustrado por Enrique Flores. José es el protagonista de esta historia en la que se le plantea un importante dilema: ¿debe ayudar a María, una mujer inmigrante, que se pone de parto o, por el contrario, obedecer las normas de su amo poniéndose en peligro? Una obra sobre las relaciones humanas, en la que se entrelaza un trama de misterio en el mundo rural de Cataluña. A partir de 12 años.

lunes, 10 de octubre de 2011

Los libros de la RESAD, al alcance de todos

Ya avisamos que comenzamos el curso con muchas novedades bibliográficas. La Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid, la conocida popularmente como RESAD, ha tenido la generosidad de donar a nuestra biblioteca un importantísimo número de sus publicaciones, que editan conjuntamente con la Editorial Fundamentos, y que vienen a reforzar de forma considerable nuestro apartado teórico, aunque en esta donación también se incluye un importante número de textos dramáticos, tanto clásicos como contemporáneos. Nuestro más sincero agradecimiento a esta institución y en especial a su Departamento de Publicaciones. Aquí va un pequeño avance de lo que puedes encontrar a partir de ahora en nuestras estanterías:

Ensayos y Manuales. Esta colección profundiza en diferentes aspectos teatrales que forman parte de las disciplinas que se imparten en la RESAD, desde escenografía, técnica actoral, expresión corporal, dramaturgia, etc., reuniendo una amplia serie de títulos de enorme calidad e interés.

Monografías. Su cometido es dar a conocer los últimos avances en la investigación teatral, por lo que se nutre, fundamentalmente, de tesis doctorales y de trabajos de rigurosa investigación. Aquí encontramos títulos tan variados como García Lorca y la tragedia española, Eduardo de Filippo: un teatro, un tiempo o La criada en el teatro español del Siglo de Oro, entre otros muchos.

Clásicos RESAD presenta las obras montadas por el Aula de Teatro Clásico. La peculiaridad de esta edición es que, a parte de ser un edición crítica, recoge el trabajo dramatúrgico previo a la puesta en escena. Y, por lo tanto, hay textos del director, de los actores, del director artístico y también un reflejo de la crítica.

Biblioteca Temática. Reúne textos fundamentales de la historia del teatro, bien traducidos, actualizados (algunos textos se editaron en edición censurada) e introducidos con una presentación. Aquí se incluyen volúmenes dedicados al teatro policiaco español, el teatro en la Guerra Civil o el teatro frívolo.  

Revista Acotaciones. La RESAD nos brinda todos los números de esta revista semestral editada desde 1998. La publicación se estructura en tres partes: artículos de investigación académica referidos al teatro en sus más diversos campos y manifestaciones y desde todas las aproximaciones teóricas y disciplinarias; textos teatrales de autores españoles contemporáneos; y una sección de noticias y reseñas de libros y exposiciones.

Por último, la Biblioteca incorpora las ediciones de promoción de los alumnos de Dramaturgia. La RESAD da la posibilidad a los alumnos de este recorrido de publicar dos textos antes de terminar la carrera: un texto corto en 3º y un texto largo en 4º. En estos libros podemos encontrar autores que con el paso del tiempo han acabado por convertirse en jóvenes valores de la dramaturgia española actual, como Paco Becerra, José Cruz o la canaria Irma Correa.